Aquí os dejo el capítulo 13. Aparece un nuevo personaje, pero hoy no creo que pueda añadirlo a su página correspondiente, así que a lo largo de esta semana lo pondré. Quería comentaros antes de poner el capítulo que las fotos que pongo para los personajes, no son así exactamente como me los imagino, simplemente es una idea para que os lo imaginéis un poco mejor :3
Nada más, espero que os guste! :D
Capítulo 13: Daniel
A la mañana siguiente, le
expliqué todo lo ocurrido a Dragnus, incluso lo que dijo Josh al final. Dragnus
sólo estaba tumbado y quieto, pero a veces, soltaba alguna que otra expulsión
de humo negro por la boca.
-Lo que dices parece muy… Extraño. Es más, ¿por qué esa persona enviaría
la cinta con los bichos de ayer? No tiene su razonamiento lógico-me dijo.
-Yo tampoco lo sé, pero el plan de Josh podría ir bien. Tu y yo podríamos buscar volando por las zonas, iríamos rápido. Y una vez que encontremos a la
otra Noa, yo volvería a casa.
-¿Y
yo?
-Estarías
con ella-le dije con una sonrisa.
-No sería lo mismo estar con ella que contigo…-dijo bajando la vista
y posando la cabeza en el césped artificial de su habitación.
-A ver qué ocurre… Josh sólo lo propuso.
-La
idea suena genial, pero… no sé. Me siento confuso.
Le propongo ir a dar un ‘voltio’ cómo él lo dice
recientemente y acepta encantado. Aprieto el botón que se usa para abrir las
puertas de su habitación y salimos disparados hacia el cielo. En una avenida lo
suficientemente grande, Dragnus aterriza en el parking exterior de un
supermercado mientras yo voy a comprar unos helados, quiero que pruebe uno, a
ver cómo reacciona. Una vez comprado dos cucuruchos de helados, me acerco a
Dragnus y me monto sobre él mientras nos vamos a un pequeño parque cercano
donde los niños juegan tranquilamente en los columpios. Nos sentamos en el
césped y pruebo el helado, pero antes, lo pongo frío un poco, que se ha
derretido.
-¿Qué
es? ¿Y por qué has comprado dos?
-Es un helado. Porque uno
es para mí y el otro para ti.
-¿Sabe
bien?-pregunta olisqueándolo.
-Para los niños, es la
gloria del verano. Prueba-le digo y le extiendo un helado y se lo come de un
bocado.
Dragnus empieza a toser y
a agitar la cabeza y yo me empiezo a reír.
-¡Pero
qué frío está!-exclama.-Me duele la cabeza.
-Pues para ti, eso no era
nada y te duele porque te lo has comido rápido y el frío afecta al cerebro, es
solo un instante.
Nos quedamos en silencio y
cuando le estoy a punto de dar un bocado a la galleta del cucurucho de helado,
el dragón me interrumpe.
-¿Me
das más helado?-dice.-La galleta al menos
me gusta…
-Toma-digo y se lo lanzo
en el aire que lo atrapa estirando su cuello.
Esta vez, lo mastica y me
lanza una mirada de gratitud. Luego, mira hacia el frente y dice:
-¿Esa
no es Cat?-dice y giro la cabeza, pero no la veo. Niego con la cabeza.-Prueba ahora.
Ahora veo con la vista de
un dragón y la distingo a lo lejos, con un chico de su altura, y supongo que
pelo negro (aunque con la vista del dragón, se ve un gris muy oscuro) y ojos
grises. Es fácil ver su aspecto porque Dragnus ve con tonos verdes y grises.
-Ya
los he visto-digo y mi vista vuelve a ser la de siempre.-Debe de ser Daniel, según el primer día que llegué aquí. No lo vi, pero
Josh y Niall dijeron su nombre cuando Cat salió disparada de la habitación del
edificio.
-Me apetece llamar la atención…-dice Dragnus y giro la cabeza hacia
él y subo las cejas.
-¿La
del chico? No seas malo.
-¿Tienes
algo mejor que hacer?
Me monto enseguida en
Dragnus que alza el vuelo y sobrepasamos a escasa altura la pareja.
-Nos ha visto-dice.
-Sabes que ahora me veré obligada a hablar con Cat…
-Posiblemente,
pero has aceptado rápido que hagamos esto-dice mientras se
ríe y hace unas vueltas en el aire. Me empiezo a marear y la cabeza me da
vueltas.
-Dragnus, has hecho
demasiadas vueltas…-le digo mientras mi cuerpo va hacia atrás solo y yo ando
aún mareada.
-¡Noa!
¡Agárrate!-me grita y lanza un gruñido.
Reacciono rápidamente y me
agarro fuertemente a la cola. Esta y las alas, son las partes que más usa
Dragnus, ya que con las alas vuela y con la cola puede girar.
-¡Me
resbalo!-grito mentalmente hasta que llego a la punta de la cola.
Dragnus mira hacia mí y
echa la cola hacia arriba y me coge en el aire. Aterriza inmediatamente y me
quito corriendo de encima del dragón y me pongo una mano en la boca y con un
brazo me rodeo yo misma la cintura mientras evito no vomitar. Dragnus se acerca
a mí algo asustado y me enrosca en su cola. Me pide perdón varias veces y le
digo que da igual, pero que intente no hacerlo demasiadas veces. Se me pasan
las nauseas y Cat y Daniel se acercan a nosotros.
-¿Estáis bien?-pregunta
Cat.
-Sí, sólo que Dragnus
tiene que controlar su emoción en el aire-digo con una sonrisa mientras miro al
dragón.
-¿Es tuyo?-pregunta el
chico, que ahora que me fijo tiene el pelo castaño y los ojos marrones. Asiento
con la cabeza mientras el chico se acerca y estira el brazo para tocar a
Dragnus, que no se resiste.-Yo también tengo uno.
-¿En serio?-pregunto
asombrada.
-Sí. Es hembra y es una
dragona de hielo. Se parece mucho a… ¿Dragnus?-pregunta levantando una ceja y
yo asiento.-Aún es joven, pero dentro de unos días, será igual de alta que
Dragnus.
-¿Cómo se llama?
-Snowfall y aún no sabe
volar.
-¿Nevada?
-Sí. Cuándo la veas, verás
cómo le pega el nombre. ¿Qué poder tiene tu dragón?
-Fuego. Deberíamos quedar
para que los dragones se conociesen… Deberías unirte a nosotros.
-Noa, no te
precipites…-susurra Cat y le miro. Me encojo de hombros y me monto sobre
Dragnus.
Éste se apoya sobre sus
patas traseras y ruge enseñando sus fauces. Directamente, alza el vuelo.
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