Aquí os dejo un capítulo cómo os prometí antes :) Esta vez, lo he subido de "Diario de una Nefilim" que creo que hace más de dos semanas que no subo uno. Este viernes a partir de las 16.00h. tendréis un capítulo de mi otra historia ^-^ ¡Beshines! Y espero que os guste :)
Pincha en más información para leer el capítulo.
Capítulo 6
Me muerdo las uñas de las manos todo lo que me es
posible. Hoy Dan va a venir a visitar a mis padres para decirles que me quiere
llevar durante todo el verano a una casa que tiene fuera de la ciudad. En
realidad, vamos a un casa donde se reunen muchos ángeles y nefilim que están de
nuestra parte, del bando del Cielo, se están preparando, como me dijo Dan. La
cuestión es que no sé si mis padres me van a dejar que haga esto... irme a
solas con Dan (cuándo en realidad no voy a estar a solas con él) en una casa
sola.
Por la
tarde, Dan llama al timbre y mi padre se extraña de que en plena tarde con el
sol apretando, haya llamado alguien. Lo miro y sonrío, triste, aunque no sé por
qué. Me da miedo de que me prepare para esa pelea y acabe mal. Acabe... muerta.
Sigo a mi padre cuándo oigo la puerta raspar el suelo y me asomo por la puerta
del salón un poco.
-Buenas
tardes. Son Dan y venía a hablar con los padres de Doona-dice Dan y extiende
una mano a mi padre, que al principio lo mira con poca confianza y luego la
estrecha. A Dan le brilla hoy el pelo y dan ganas de acariciarlo; va con unos
pantalones que le llegan por debajo de la rodilla de color gris y una camiseta
azul marina de manga corta.
Mi
padre le deja paso y luego hace que lo siga hasta el salón. Yo me quedo en la
puerta y le echo una mirada a mi madre, que ha apagado la televisión y se ha
girado hacia nosotros tres. Cuando Dan pasa junto a mí, entrelaza sus dedos de
la mano con los míos y me da un fuerte apretón para darme ánimos. No olvida de
sonreír. Mi padre se sienta junto a mi madre y Dan se sienta en el otro sofá.
Yo me siento junto a él.
-Venía
a pedirles que dejasen a su hija pasar las vacaciones de verano en la casa de
verano de mis padres, fuera de la ciudad-dice con un tono serio mientras me
pasa un brazo por los hombros y me atrae hacia él. No puedo dejar de
temblar.-Mi opinión personal es que, su hija ha hecho un gran trabajo con los
estudios de este año y me gustaría que pasase el verano conmigo y mis padres.
-No
conocemos a tus padres-comenta mi madre arqueando una ceja.
-Lo sé.
El problema es que mis padres trabajan muchas horas al día y esta tarde cogen
las vacaciones. Además, no trabajan en esta ciudad. Yo me quedo con un amigo en
su casa-explica. Suena a mentira, pero mis padres no saben qué decir al
respecto.
Mientras
hay un silencio absoluto, oigo una puerta del piso de arriba abrirse y los
pasos rápidos de Airan, que baja ilusionada.
-¡¿Mamá
puedo ir...?!-empieza a gritar ilusionada, pero deja la frase a medias cuando
ve a Dan y se pone roja.-Oh, hola.
-Tu
debes de ser Airan, la hermana de Doona-dice mientras mi hermana se acerca a
mis padres, pero para ir con ellos tiene que pasar cerca de Dan y no le quita
el ojo de encima. Dan le ofrece la mano y ella la estrecha. Mientras se la
ofrecía, Dan debe de haberse relajado un poco, porque notaba un gran peso en
mis hombros y ha bajado el brazo a mi cintura.-Si tus padres me permiten
decírtelo, les proponía llevarme a tu hermana a la casa de verano de mis
padres, fuera de la ciudad durante todas las vacaciones.
-¡Por
mí cómo si te la llevas para siempre!-exclama mi hermana alegre y no puedo
evitar ponerme roja, mientras Dan se ríe y mis padres sonríen.
La
conversación vuelve a animarse cuándo Airan intentan convencer a mis padres de
que me vaya con él y me dejen al menos que haga lo que quiera un verano.
Parece que Airan no me va a querer ver este verano.
Mi
madre se pone de nuestra parte porque opina que ya soy algo mayor y que podría
estar sola durante el verano. Además, dice que no iba a estar sola. Mi padre
duda, pero aún así, entre todos le convencemos para que me deje ir.
-Tiene
que partir hoy conmigo. Esta misma noche, mis padres vienen a
recogernos-comenta Dan.
Al
final, me pongo con mi madre y con Airan a hacer las maletas mientras Dan y mi
padre hablan de 'hombre a hombre' (así lo ha dicho mi padre) en el salón. Me
pongo roja nada más pensar en las barbaridades que le estará diciendo ahora al
pobre Dan, cuyo plan ha salido bien.
Al
final, me llevo ropa suficiente en dos maletas; Airan ha tenido que bajar
varias veces para preguntar algunas cosas sobre el clima de allí y la casa de
verano de 'sus padres'.
Al
atardecer, me despido de mis padres y Airan y les deseo un buen verano. Mi
hermana viene hacia mí y me rodea con los brazos y me susurra:
-No me
ha gustado la idea de que me dejes sola tres meses, pero admito que tu también
deberías de divertirte.
La
rodeo con los brazos por el cuello y cuando se separa, le doy un beso en la
frente. Dan me rodea de la muñeca y tira de mí con la escusa de que no
llegaremos cuando sus padres estén en la casa de su amigo.
Cuando
nos alejamos lo suficiente y la noche cae, me dice:
-Venga,
despliega esas alas. Nos queda un vuelo movido esta noche.
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