Capítulo 17
-Ten, la mochila-me dice, dándome la mochila que le di con las cosas que me llevaría. No tiene nada especial, una foto de mi familia y algunas de mis buenos amigos.-Tranquila, no he husmeado como tu hiciste en mi casa. ¿Ya te has movido lo suficiente?-me pregunta.
-Sí, ya tengo el cuerpo activo. ¿Qué vamos a hacer ahora?-pregunto.
-A comer-dice el vampiro con una sonrisa y me entra un horrible escalofrío por la espalda.
Empezamos a andar por el cementerio y empiezo a hacerle preguntas.
-¿Qué poderes tiene un vampiro completo y cuáles un medio vampiro?
-Un vampiro completo tiene el poder de relampaguear, uñas fuertes, mejor vista, mejor oído, mejor olfato, duerme de día. Tiene muchos. Un vampiro a medias tiene todo lo que te he dicho, pero de un nivel más bajo. No es tan fuerte como uno completo.
-Y... ¿no se pueden convertir en murciélago?
-¡Ja, ja, ja, ja, ja! ¡No! Tu ves muchas películas de terror y lees demasiado. No todo lo que se lee es cierto. Los vampiros no nos podemos convertir en nada.
-¿Y qué me dices de los dientes?-pregunto frustrada al saber la realidad.
-¿Los colmillos? También es otra tontería humana. Los vampiros tenemos los dientes igual que los humanos, pero más fuertes. También tienen extra saliva y eres más fuerte que un humano. Con un empujoncito de nada, le puedes romper un hueso o algo.
-¿Extra saliva?-pregunto con el ceño fruncido. Nunca había oído hablar de esa habilidad.
-Sí. Tu saliva es curativa para heridas no graves. Por ejemplo, imagínate que te haces un pequeño corte, en vez de ponerte una tirita como los niños pequeños, te echas un poco de saliva y en menos de dos minutos, la tienes cerrada y curada. No funciona en heridas profundas-me explica.
Estuvimos hablando de cosas que haremos a partir de ahora. Me comenta que viajaríamos por el mundo, es lo mejor que puede hacer un vampiro. Nos montamos corriendo en unas ramas de un árbol, porque el vampiro había visto un hombre cerca de una tumba y al parecer, es ideal.
El hombre estaba a pocos metros bajo nuestros pies. Yo no pegué un salto, escalé lo más rápido que pude. Bajamos los dos de un salto y nos hicimos pasar por extranjeros para preguntarle al hombre.
-Disculpe señor-dijo el señor Rhamus.-¿Me podría decir cuál es la manera más rápida de ir a un supermercado?
-Sí, aunque creo que a estas horas todos estarán cerrados-dice el hombre y acto seguido se gira para hacernos con los brazos qué calles coger. El vampiro aprovechó su explicación de guía y le durmió echando un apestoso aliento por la boca. El hombre se derrumbó de inmediato.
-¿Qué es lo que ha hecho? ¿Está muerto?-pregunto algo asustada. El vampiro que estaba agachado junto al hombre, levanta la cabeza y me echa una mirada de irritación.
-No lo he matado... Los vampiros completos y los medios vampiros también, tenemos un aliento un poco fuerte que hace que la "presa" se desmaye por unos minutos. Después, al pasar cierto tiempo, se levantan sin recordar lo que ha ocurrido-me dice.
Veo como el vampiro le hace un corta con una uña encima de una vena que se le nota mucho en uno de los brazos del hombre. Acerca la boca y empieza a beber. No tarda nada y termina, le echa un poco de saliva y nos vamos corriendo de allí. El señor Rhamus me tenía que coger siempre que debiésemos de correr, porque yo aún no sé relampaguear.
-Se me ha olvidad... Tenías que haber bebido-me dice parándose en seco.
-Ni de broma bebo sangre humana-digo.-¿Sabe? Yo también tengo parte humana.
-Lo eras, ahora eres medio vampiro. Puedes comer fruta, carne, verdura y lo que te dé la gana, pero nunca te será suficiente, te quedarás con ganas de más. Necesitas beber sangre humana, es lo necesario para un vampiro. Si no lo haces, poco a poco te sentirás débil y te morirás. Mientras tanto, cómo éste ha sido tu primer día de ver comer a un vampiro, te lo dejo libre. Buscaremos cerca de una granja y beberás sangre de animal, que es lo mismo, pero no nutre lo suficiente-me explica.
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